GENTE VERITAS

Alejandra Brenes es nuestra directora de la Escuela de Diseño del Espacio Interno y docente de la Universidad VERITAS desde el 2008.

Arquitecta y Máster en Educación siempre ha estada ligado al diseño y ha tenido sensibilidad por los espacios habitados desde niña. “Nací en San José, Moravia, en una casa victoriana de madera, techos y ventanas altas y mosaicos amarillos con figuras geométricas.” Estudiar diseño le pareció lo más “natural”. Según sus palabras: “Mi abuelo era carpintero, mi papá siempre tenía soluciones para todo en medio de máquinas, aparatos y herramientas. Aprendí que un material se puede convertir en muchas cosas y tener muchos usos de acuerdo a la forma en la que se trabaje. No me imagino haciendo algo en donde la respuesta sea una sola, definitiva y correcta.” También le motiva la interdisciplinariedad y la capacidad inherente del diseño de mejorar la vida de las personas: “Diseñar te da la libertad de moverte en muchos campos y trabajar mejorando las situaciones de vida de las personas.”

Alejandra inició la docencia al mismo tiempo que empezó su ejercicio profesional y ha dado clases desde entonces en la Universidad de Costa Rica, en la Universidad del Diseño y en la Universidad VERITAS y día a día sigue encontrando razones para seguir enseñando, porque ¨se aprende cuando se desarrolla una experiencia significativa, cuando se construyen vínculos con otras personas, cuando construimos ideas entre todos para encontrar soluciones a problemas relevantes para la sociedad.” También porque es un mecanismo para nunca dejar de aprender: “Una situación tiene tantas verdades y posibilidades distintas como personas la enfrenten en el proceso de investigar y crear. Esto te provoca preguntarte todo y seguir aprendiendo todos los días.”

En su tiempo libre le encanta escaparse a la playa “…el olor, el color, el sonido, la textura, la temperatura. Puedo estar ahí solo una hora y no entrar al mar, pero es la experiencia que me da más paz. Sumarle familia y un buen libro lo hace mucho mejor.

El cine es otra de sus aficiones, la película que más ha disfrutado es Amelié, la cual: “…combina dos cosas maravillosas: París (bastante idealizado) y situaciones simples, pero mágicas, que cambian la vida de las personas.” Su deporte favorito es bailar, la música siempre es la mejor compañera, ella es de las personas que les gusta lanzarse a pista en cualquier celebración.

Un pilar de su vida es su familia, con la que es muy unida, sobre todo con su esposo y dos hijas con los que disfruta de ¨tardes de patio¨ en su casa, citas donde la música es un tema obligatorio, y siempre se habla de un plan para conocer algún lugar nuevo. Es un proyecto que nació primero entre la pareja para tener buenos recuerdos marcados en un mapa y se convirtió en un plan de cuatro. En tiempos de pandemia, ha sido una oportunidad también para sacar fotos viejas y volver a vivir esos momentos.

De hecho, esta época ha servido para compartir aún más en familia, los fines de semana hacen sesiones de recuerdos y añade: “... estoy segura que esto va a hacer mucha diferencia en nuestra vida de familia cuando pasen los años. Todo encierra una oportunidad.”

Alejandra siempre te recibe con una sonrisa, es entusiasta y positiva, no en vano la frase que repite a menudo es: ¨Todo va a estar bien! Esto también pasará¨. Y es que ella sabe que hay que mantener siempre la perspectiva y seguir adelante, porque al final todo pasa.

Si pudiera darle un mensaje a Alejandra Brenes de 19 años le diría algo que también nos dice a nosotros: “¡No des nada por sentado, todo puede cambiar, pero todo presenta siempre una oportunidad, te toca a vos trabajar para encontrarla!”

Ella es una persona cariñosa y social y tiene claro lo que quiere hacer cuando acabe la pandemia y el periodo de distanciamiento social: “Abrazar a mi papá, mi familia, mis amigos.”

En esta foto que nos compartió Alejandra reúne en una imagen las tres cosas que la hacen sentir completa: Dios, su familia y la arquitectura.